Todos sabemos muy bien que el comer alimentos ricos en grasas, azucares e hidratos nos hacen ganar peso. También sabemos que las frutas, legumbres y verduras son beneficiosas para nuestra salud y debemos consumirlas habitualmente.
Pero hay ciertas costumbres que mantenemos y no nos ayudan en nuestra ardua lucha contra los kilos. Aquí te daremos unos truquitos sobre los hábitos que debes incorporar y que te ayudarán a bajar de peso.
Durante la comida debes estar tranquilo y sobre todo debes comer sentado. Cuando lo haces de pie, o caminando o mientras trabajas no registras la ingesta, y eso ha que quieras consumir más alimentos.
No comas rápido, mastica bien los alimentos. Ello te dará una mayor saciedad.
En la medida de lo posible haz tus compras después de alguna de las comidas que haces diariamente, el no tener hambre mitigará tu tentación y evitará que compres alimentos que no te conviene comer.
Piensa muy bien y haz una lista detallada de los alimentos que necesitas, el propósito es que solo compres lo que contiene la lista. Nada más
Si el hambre te ataca a media mañana o media tarde, puedes comer ciruelas pasas, albaricoque seco, zanahorias, un sándwich pequeño con pan integral de molde, un vaso de leche descremada.
Lo ideal es que mientras comes comas, deja de lado el ver la televisión. Puedes sostener una charla agradable con quien comparta la comida contigo, o si comes solo pon música y disfruta. Mientras estas masticando acostúmbrate a dejar los cubiertos a un lado, es aconsejable que lo hagas cada tres bocados que ingieras. Al principio deberás pensarlo, pero una vez que hayas incorporado este hábito lo harás con total naturalidad. Disfruta cada bocado como si fuera el único, los bocados deben ser pequeños y debes saborearlos lentamente, eso te dará una sensación placentera de saciedad.
Trata de no cocinar de más, eso evitará que comas de más. Tu comida debe ser equilibrada, debe contener proteínas e hidratos. Para alimentarte equilibradamente en el día debes consumir vegetales, proteínas, lácteos, hidratos de carbono y frutas
Consume ensaladas y hazla con una gran cantidad de vegetales, zanahoria, tomate, hinojo, pepino, repollo, apio, tomate. Los vegetales fibrosos son duros, difíciles de masticar, no son fáciles de digerir, por lo que te aportan una mayor saciedad.
Acostúmbrate a hacer sobremesa, deben pasar al menos 15 minutos después de haber comido para que aparezca la sensación de saciedad. Una comida hecha a prisa no se registra, por lo tanto no sientes que hayas comido. Como consecuencia de ello, inmediatamente después de haber comido vuelves a sentir hambre.
Debes cumplir con lo de desayunar como un príncipe, almorzar como un rey u cenar como un mendigo. Se debe comer en forma más abundante antes de iniciar las actividades o durante ellas. La cena, como a la noche la actividad es menor, debe ser frugal.
Si un día comiste mucho equilíbralo y al día siguiente come menos. Otro consejo, no te peses el día después de haber hecho una gran comida, porque de seguro subiste de peso, y eso bajará mucho tu ánimo.
La incorporación de estos buenos hábitos a tu vida diaria te ayudaran a descender de peso. Comienza a incorporarlos de a poco, y notarás inmediatamente la diferencia.